En el principio Jesús mismo reposo el sábado como un día de honor a la creación. Es evidente que nuestro Señor veía la importancia de que sus hijos recordaran cada semana al Creador, y su creación. Si alguien nos presenta otro día de reposo sabemos que está equivocado, no se puede cambiar la fecha de nacimiento de nadie, ni siquiera de nuestros héroes. Podemos  celebrar sus grandes hazañas   y victorias en otros  días, pero nunca podremos cambiar el día de su nacimiento. “El sábado es un recordatorio de nuestra creación por Dios, y de nuestra  redención mediante la sangre de Cristo” Cuando Dios  le dio los 10 mandamientos al pueblo de Israel le dijo: “Acuérdate del día de reposo para santificarlo, seis días trabajaras, harás toda tu obra pero el séptimo día es de reposo para Jehová tu Dios”. Aquí claramente se nos dice que el día de reposo es el Séptimo día, pero ¿cuál es el séptimo día?
Es interesante notar que un año corresponde al tiempo en que demora la Tierra en dar  vuelta alrededor del sol, un mes está en relación a la luna y la Tierra, un día es lo que demora la Tierra en rotar sobre su propio eje,  pero una semana ¿qué es? No existe ninguna razón astronómica para el origen de la semana, lo único que justifica su origen es la creación. Desde entonces se ha mantenido inamovible en el tiempo como un monumento.
Pero  aun sigue la pregunta ¿cuál es el séptimo día?
La verdad es que encontrar el séptimo día  va a  depender de cuál sea el primero. Si empezamos con el martes entonces el séptimo día sería el lunes y así podrían probar con cada uno de los días, pero eso no nos llevaría muy lejos.
En el libro de Marcos capítulo 16 se nos cuenta la historia de la resurrección de Jesús. Es bien sabido por todos  que Jesús  resucito un día domingo, hasta nuestro calendario lo recuerda cada año como el domingo de resurrección.
En el relato del capítulo 16 dice que fue “pasado el día de reposo… muy de mañana el primer día de la semana vinieron de sepulcro”. Pero no encontraron a Jesús puesto que el había resucitado. La Biblia dice claramente que el primer día de la semana es el día en que resucito Jesús. Ese día fue domingo, el primer día por lo que dio, sin lugar a dudas, el sábado es el séptimo día.
Jesús mismo nos confirma esto, puesto que el acostumbraba ir a la Sinagoga (Iglesia Judía) cada sábado a adorar (Lucas 4:16) Claramente Jesús  esta aquí  dándonos  un ejemplo para seguir. Pero ahora pero si el sábado es el séptimo día de la semana. Jesús mismo  lo reconoció. ¿Por qué hoy, tanta gente lo ha olvidado?
El sábado es un símbolo de nuestra conexión con Dios. Es necesario que aquellos que deseen santificar el día de reposo tengan sus corazones santificados  por Jesús. La historia nos cuenta que fue el Emperador Constantino quien cambio el sábado, como día de reposo hacia el domingo. Pero antes que eso sucediera muchos ya lo habían cambiado en su corazón. Antes de juzgar a aquellos que se atrevieron
a cambiar el día de reposo, deberíamos preguntarnos si no lo hemos cambiado nosotros en nuestro corazón.