LA IMPORTANCIA DE LA CIENCIA
“El conocimiento es poder” la expresión atribuida a Bacon (1561-1626) se encuadra en una época de confianza y optimismo ante la posibilidad de que el conocimiento científico de la naturaleza permitiera manipularla. Fue precisamente esta creencia la que dio origen a los grandes avances y progresos que caracterizaron a la edad moderna. Por primera vez el hombre no solo estaba comprendiendo a la naturaleza y sus fenómenos sino que también tenía la oportunidad de adelantarse a ella y utilizar convenientemente sus grandes potencialidades en lugar de solo estar a su merced. Esto permitió a los países en donde se privilegió el desarrollo de la ciencia tomaran la delantera en cosechar los beneficios de sus descubrimientos tecnológicos, energéticos y bélicos.
Esto no solo se aplica al periodo de la revolución industrial o la carrera espacial, sino que aun hoy son los llamados países del primer mundo los que más invierten en investigación y desarrollo al punto que el nivel de “investigación científica” de un país casi podría ser un un indicador de desarrollo económico. Desde esta perspectiva podemos entender la importancia de la ciencia como un vehiculo de desarrollo y bienestar social.
Más allá de las ventajas económicas o geo-politicas que podría entregar el desarrollo científico, personalmente creo que la principal importancia de la ciencia esta en que nos permite aprovechar el conocimiento acumulado a lo largo de toda la historia y así poder aprender de los errores del pasado y no estar condenados, casi inevitablemente, a repetirlos en cada generación. Es aquí que las ciencias humanas y sociales (por ejemplo las ciencias de la educación) tienen una tremenda relevancia y pueden entregar una oportunidad de desarrollo humano a nuestros países “del tercer mundo”.
            La ciencia debe estar al servicio de la humanidad y contribuir a solucionar los problemas dificultan la vida e impiden a las personas vivir en plenitud y felicidad. Es aquí donde la moral (que no pertenece a la ciencia) juega un rol importante para que el ser humano no use el conocimiento científico para fines destructivos (ejemplo: bomba atómica vs tratamiento contra el cáncer)sino por el contrario los direccione hacia el “bien”.

ARISTÓTELES Y EL PENSAMIENTO INDUCTIVO
Una de las grandes herencias del los pensadores de la Grecia antigua es el razonamiento inductivo, principalmente por parte de Aristóteles (Salgado, 2012), quien entendía el origen del conocimiento como el resultado de la percepción y experiencias de la realidad. De esta manera se puede llegar a realizar conclusiones generales a partir de la observación de hechos específicos. Un ejemplo clásico de razonamiento inductivo es:
1.     Todos los cuervos observados hasta el momento han sido negros
2.     Por lo tanto, todos los cuervos son negros
Para Aristóteles este es un camino de ida y vuelta, puesto que se parte de lo particular a lo general, y luego de lo general a lo particular. En primer lugar por medio de la experiencia basados en nuestros sentidos nos damos cuenta de un fenómeno que se repite y buscamos dar una explicación a dicho fenómeno. Actualmente esto nos permite tener un método para controlar el fenómeno observado, el mismo método que terminamos utilizando para estudiar en detalle las experiencias particulares (método deductivo).
Tanto el método inductivo como el deductivo son estrategias de razonamiento lógico que se complementan. Como hemos dicho el método inductivo utiliza premisas particulares para llegar a una conclusión general, y el método deductivo usa principios generales para llegar a una conclusión específica.
El aporte de Aristóteles y su pensamiento inductivo fue y es de gran importancia en el trabajo científico en general (Neisser, 1981), ya que consiste en la recolección de datos sobre casos específicos y su análisis para crear teorías o hipótesis.
La observación es uno de los aspectos clave en el método inductivo pero también utiliza la experimentación para conseguir los datos necesarios que llevan al planteamiento de una conclusión general.

DESCARTES Y LA IMPORTANCIA DE LA RAZÓN CIENTÍFICA
Descartes es el padre de la filosofía moderna, para los sentidos no son un método confiable de observación, el racionalismo cartesiano se fundamenta en esto y establece que la percepción de los sentidos no es fiable por lo que debemos apoyarnos en el método dejando la percepción como método de conocimiento. Entonces el ser humano por medio de la razón necesita de un método que le permita conocer el mundo en términos objetivos, un método que lo libere de los peligros de la percepción y observación subjetiva y lo encamina hacia una observación objetiva (De Teresa, 2007).
El método cartesiano hace del escepticismo un método, se duda de cada idea que puede ser dudada. Descartes establece la duda: solo se puede decir que existe aquello que pueda ser probado y para ser probado debe aplicarse un método racional. Para Descartes, “en sentido estricto, solo existe una ciencia, la sabiduría humana. La razón es una y la misma, aunque se aplique a objetos diferentes” (De Teresa, 2007).
Contrario a lo que se podría pensar Descartes era un hombre de profundas convicciones religiosas claro que muchas de esas convicciones eran distintas y en ocasiones contrarias a como se concibe la fe en esos tiempos. Para él, la búsqueda de la verdad era la búsqueda de Dios mismo. Las verdades eternas, las verdades matemáticas, por ejemplo, habían sido sentadas por Dios y de él dependían. Para muchos de sus contemporáneos estos pensamientos eran heréticos y dignos de castigo por parte de Dios. Esto le llevo incluso a autocensurarse en la publicación de sus escritos con el fin de no provocar a las autoridades religiosas de su tiempo (Ángeles, 2017). Precisamente el conflicto de descartes con la religión es un buen ejemplo para entender su énfasis en la razón como medio de obtener conocimiento. Descartes rechazó la superstición y las emociones como método válido de conocer la realidad, puesto que estos eran subjetivos y muchas veces manipulables, por lo que insistió en que la verdad debe ser alcanzada por medio de la razón, y es precisamente esa razón la que nos permite conocer incluso a Dios. Creo que, sin pretenderlo, el pensamiento de Descartes termina generando la dicotomía entre FE y RAZON, dicotomía que a su comprender no debería existir puesto que para el Dios es la personificación de la verdad.

KUHN Y LOS PARADIGMAS
Thomas Kuhn fue un físico y filósofo norteamericano que nació en un hogar de padres judíos en 1922. En el año 1949 obtuvo su doctorado en Física en la Harvard University, fue en esa misma universidad en donde dictó la cátedra “Historia de las Ciencias”.
Fue en sus primeros años como profesor en Harvard, mientras estudiaba las creencias científicas de grandes pensadores antiguos (Aristóteles, galileo, etc.), cuando se cuestiono como era posible que personas inteligentes hubiesen pensado cosas tan equivocadas y las hubiesen aceptado como verdades científicas y por lo tanto muchas veces incuestionables (Pardo, 2001).
Fue gracias al método hermenéutico (disciplina originada en la teología que permite interpretar los textos sagrados para conocer su verdadero significado y que requiere comprender cada texto dentro de su contexto: histórico, gramatical, socio-cultural, geográfico, etc.) que Kuhn se dio cuenta de al examinar las creencias de los pensadores del pasado, dentro de su contexto histórico y de lo que en su tiempo se aceptaba como verdad (a esto le llamo “paradigma”) dichas creencias eran razonables y era posible seguir considerándolos como trabajos científicos aun cuando posteriormente hayan sido descartados. Para Kuhn lo que genera el conocimiento científico actual no es solo la acumulación de conocimiento científico a lo largo de la historia (Pardo, 2001), sino que son los cambios de paradigmas los que generan revoluciones científicas.
De esta manera no es posible comparar la ciencia de galileo con la ciencia actual (inconmensurabilidad), sino que debe ser comparada y estudiada en comparación con la ciencias y creencias (paradigmas) de su tiempo, aun cuando en la actualidad estos conocimientos no sean considerados verdades científicas, eso no quita que en su momento si constituían ciencia.
Para muchos el aporte de Kuhn con su teoría de los paradigmas y sus cambios generaron en si mismos una “revolución científica” produciendo un “cambio de paradigma” en la manera cómo entendemos la ciencia pasada y actual, su desarrollo y proyección.

¿CUAL ES EL CAMINO DE LA CIENCIA? 
Es innegable que el conocimiento científico se va construyendo sobre la acumulación de los conocimientos previos, si cada generación tuviera que redescubrir el fuego o la rueda no abríamos llegado muy lejos. No estoy totalmente seguro de que Kuhn pretendiera negar el carácter acumulativo y evolutivo del conocimiento científico, puesto que aun después de un cambio de paradigmas hay verdades que continúan siendo el fundamento para continuar con la construcción de conocimiento científico.
El conocimiento científico de hoy es el resultado de los aportes de los hombres de ciencia de todos los tiempos, con errores y aciertos (por ejemplo: la química tiene mucho que agradecer a la alquimia) ellos nos han permitido entender que la observación del investigador es tremendamente importante (Aristóteles) pero necesita de un método racional para no caer en sesgos y subjetividades propias de observador (principalmente en las ciencias sociales), nos recuerdan que solo si somos capaces de cuestionarnos todo (Descartes) estaremos libres de preconceptos que nos impidan llegar a conclusiones basadas en evidencias científicas que sea verificables.
Sin duda hoy la ciencia cuenta con un método que ha sido pulido y mejorado en base a ensayo y error, terminando por ser validado en base a sus resultados nos a dado grandes avances y que en cierta manera nos promete un futuro mejor. Un quehacer científico sistemático en sus lineamientos, ordenado en su estructura, metódico en la recolección de la información, racional en su interpretación y con una mirada critica que permite cuestionar sin temor los paradigmas actuales en busca de nuevos campos de reflexión.
El desarrollo exponencial que a tenido la tecnología en los últimos años y los avances en la medicina y las ciencias de la salud que han permitido aumentar la esperanza de vida como nunca en la historia podrían hacernos creer que vamos por el camino correcto, sin embargo, creo que no debemos descartar la posibilidad de que el futuro, bajo un nuevo paradigma, nuestros métodos carecen de validez y con admiración se pregunten ¡como era posible que creyéramos eso…!

REFERENCIAS
1. Ángeles Cerón, Francisco de Jesús. (2017). El talante espiritual de Descartes. Revista de filosofía open insight, 8(13),  101-121. Recuperado en 04 de abril de 2020, de http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S2007-      24062017000100101&lng=es&tlng=es. 
2. De Teresa, J. (2007) Breve introducción al pensamiento de Descartes. Univ. Aut. Metropolitana, México. Neisser, U.: Procesos cognitivos y realidad, Madrid, 1981.
3. Pardo, Carlos Gustavo (2001). La formación intelectual de Thomas S. Kuhn. Una aproximación biográfica a la teoría del desarrollo científico. Pamplona: Eunsa
4. Salgado, Sebastián (2012). "La filosofía de Aristóteles". Cuadernos Duererías, serie Historia de la Filosofía. Revisar online en: http://guindo.pntic.mec.es/~ssag0007/filosofica/aristoteles-duererias.pdf